La festividad de la Asunción de la Virgen, este 15 de agosto, recuerda que la Virgen María “terminado el curso de su vida en la tierra, fue llevada en cuerpo y alma a la gloria del cielo”, como lo afirma el Concilio Vaticano II. Por otra parte, en la fiesta de la Asunción de la Virgen, en todas las diócesis del país se celebra también el Día de la Vida Consagrada, destinado a destacar la labor que realizan las religiosas y religiosos a lo largo de Chile.

La hermana Andrea Valdés, Cong. Terceras Franciscanas Misioneras de la Inmaculada Concepción, coordinadora de la Conferre en la región, nos cuenta que esta fecha es vista como un día de encuentro para dar gracias por la vida de vocación y una oportunidad para compartir y conocerse.

En la Diócesis de Rancagua hay 19 congregaciones femeninas y 13 masculinas, las que fueron invitadas a una reunión que se realizará el día 15  en la Ermita de Santa María de Los Ángeles en Puente Negro, donde celebrarán la Eucaristía; luego habrá un almuerzo y actividades recreativas. Cada fraternidad aporta con un premio para la realización de un bingo, habrá un compartir fraterno antes de retirarse a sus destinos.

Cuenta que la actividad se realiza al interior de la casa debido al clima y a que muchas de las religiosas son adultas mayores, lo que da cuenda de una preocupante realidad: en cada una de las congregaciones el promedio de edad de las religiosas y religiosos es cada vez mayor.

 

ORANDO POR LA VOCACIONES

La hermana Andrea explica que es un tema de preocupación recurrente la falta de vocaciones a la vida consagrada, y que por ello hay un plan de trabajo como CONFERRE para la realización de actividades de promoción en cada una de las pastorales de las congregaciones. Esto acompañado de la oración de todos los fieles, en especial en este Año de la Oración al cual ha convocado el Papa. 

La religiosa señala también que el contexto de las vocaciones ha cambiado. Hoy se habla de vocaciones tardías, aunque sea solo un concepto, porque hay personas que ya con una profesión y experiencia laboral y con una edad superior a los 30 años se deciden por la vida religiosa. Sólo un concepto, porque no hay límite de tiempo para Dios, acota.

 

(RECUADRO)

El Día de la Asunción de la Virgen María nos recuerda la ascensión del cuerpo de María, la madre de Jesús de Nazareth, a los cielos, luego de terminados sus días en la tierra. Esto quiere decir que la Madre de Jesús, a diferencia del resto de los seres humanos que mueren en gracia de Dios, fue llevada al cielo incluso con su cuerpo, creencia milenaria y que ha sido graficada en una larga tradición iconográfica. Esta creencia fue concretada como en el dogma de la Asunción de María, del 1 de noviembre de 1950, definido por Pío XII. En este dogma, el Papa afirma que el cuerpo de la Virgen fue glorificado inmediatamente después de su muerte, sin esperar para ello, como el resto de los seres humanos, el fin de los tiempos. De esta forma, el cuerpo de María, que llevó en su seno a Jesús, no experimentó la corrupción.