¿Cómo interpela la realidad de hoy a la Vida Consagrada?

Viernes 28 de Julio del 2023
- Al celebrarse su día, el próximo 15 de agosto, Rumbos conversó con tres consagrados de nuestra diócesis para conocer cómo viven su vocación en la realidad actual.

Cada 15 de agosto, fiesta de la Asunción de la Virgen, los religiosos y religiosas de nuestra Diócesis de Rancagua se reúnen para compartir. Este año, la jornada comenzará a las 9:30 horas en la parroquia Nuestra Asunción de María de Quinta de Tilcoco, donde compartirán un desayuno, para luego visitar el Santuario de la Virgen del Carmen. Por la tarde, tendrán un almuerzo y una jornada de recreación fraterna, para despedirse con un tecito.

En la Diócesis de Rancagua existen 13 comunidades religiosas masculinas y 20 comunidades religiosas femeninas distribuidas en diferentes comunas de la Región de O’Higgins, algunas son de claustro, como los hermanos trapenses; y las Benedictinas de la Asunción, ubicadas en Rengo, y Adoratrices del Santísimo Sacramento, pero también están las dedicadas a la educación u otro carisma, sin embargo, todos tienen un aspecto en común, su consagración a Dios.

En esta edición de Rumbos conversamos con tres consagrados de nuestra diócesis quienes dieron a conocer ¿cómo los interpela la realidad actual en su vida consagrada?

 

TESTIMONIOS

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Stephen Kwaku Nyantey, SVD, animador vocacional de la Congregación Misioneros del Verbo Divino en Chile:

“Soy religioso, sacerdote y misionero de la Congregación, llegué el 17 de octubre de 2019, a Chile para trabajar en la parroquia San José Obrero de Rancagua. Soy de Ghana”.

“La vida religiosa a los jóvenes de hoy no les interesa mucho, porque hay muchas puertas, muchas oportunidades. Ellos al salir del colegio se están preparando para ir a trabajar o continuar sus estudios; ellos ven como algo muy raro que una persona se dedique -según ellos- sólo a rezar. Entonces, como religiosos, estamos llamados a ser y no para hacer, muchos de nosotros queremos hacer cosas, pero en primer lugar tenemos que ser, estar ahí como religiosos, eso es muy importante. En ese sentido, hoy Cristo nos está pidiendo escuchar, por algo Dios nos ha dado una boca y dos orejas, para poder escuchar más a las personas y hablar menos. Yo trabajo con jóvenes y ellos quieren ser escuchados, y nosotros debemos escucharlos y acompañarlos. La gente está viviendo momentos muy difíciles, nosotros no podemos construir casas, pero sí podemos estar ahí con ellos para escucharlos y compartir con la gente. Creo que Dios nos está invitando a escuchar. Hoy, como religiosos no debemos tener miedo de la crisis vocacional porque Dios nos ha prometido ‘Estaré siempre con ustedes hasta el fin del mundo’, entonces, Él sabe cómo animar a los jóvenes para que también sientan esta vocación, nosotros lo que debemos hacer estar con ellos, escuchar, acompañar y guiar”.

 

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Hna. Elena Ulloa A. Congregación de Hermanas Terceras Franciscanas Misioneras de la I.C.:

“Las distintas realidades y situaciones que aquejan a la sociedad e instituciones convirtiéndose en dificultades con mayor o menor importancia nos interpelan. La Iglesia, comunidad y como Institución nos vemos preocupados de cómo continuar anunciando el Evangelio si se carece de vocaciones y de un compromiso serio en su realidad de ser consagrada al servicio del prójimo y de sus problemas. Es por ello que me invita a mirar con nuevos ojos la vida consagrada, redescubriendo su calidad y un nuevo sentido, en las realidades propias de los que optamos por una vocación, como don siempre nuevo de servicio desde la vida religiosa y la consagración a vivir en comunidad, la fraternidad de una comunión en misión con la Iglesia, y la responsabilidad de mantener vivo el carisma y la espiritualidad de mi fundadora Madre María del Carmen a quien he decidido seguir como modelo de vida, testimonio de fe y espíritu de servicio”.

“Hoy las dificultades humanas hacen una crisis de identidad creyente, religiosa de fe, espiritual y por esto no es atractiva una opción de vida consagrada y lo mismo hace en las vocaciones ya consagradas crear dudas y permite abandonar la vocación, dejar a un lado ese modelo de vida fraterna, al igual estamos envejeciendo y también hay una gran disminución de los miembros”.

 

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H. Benjamín Murillo Toro (Hospedero, Encargado Vocacional, Cantor, Citarista), monje trapense del monasterio Santa María de Miraflores, Tunca:

“Tengo 37 años y estoy en el monasterio desde hace 7 años. Somos una Orden contemplativa. Buscamos a Dios en comunidad y, como decía el padre Lino, oramos juntos cantando. Ante la pregunta de cómo me interpela la realidad que vivimos (de cambios, de crisis) me viene otra pregunta… de Jesús: “¿Por qué están con tanto miedo? ¿Cómo no tienen fe?” (Mc 4,40) Como consagrado, como seguidor de Jesucristo, lo que hago o intento hacer es justamente mirarlo más a él, escuchar atentamente sus palabras en medio de la realidad que nos toca. Tenemos el trabajo de reafirmar nuestra esperanza cada día, de hundir más firmemente sus raíces en la fe que creemos, en el Señor Jesús. San Gregorio Magno nos dice que reflexionemos con seriedad sobre lo que creemos, y que echemos el ancla de la esperanza en la patria eterna ya desde ahora. No se trata de vivir en las nubes, ajenos a la realidad, sino de que vivamos con los pies bien puestos en la tierra dando testimonio con nuestra vida que tenemos un Padre, Dios, que nos ama infinitamente y cuida de nosotros, y que nos ha manifestado su amor dándonos a su Hijo que nos amó hasta entregar su vida por cada uno de nosotros. Si nos detenemos a reflexionar sobre esta realidad, sin duda que, sea cual sea la situación que vivamos, nuestra esperanza estará firme, y caminaremos seguros, con una confianza grande”.