La Diócesis de Rancagua se está preparando para celebrar su centenario el próximo 2025 y uno de los énfasis pastorales establecidos por el obispo de Rancagua, monseñor Guillermo Vera, la Vicaria Pastoral y el Consejo Presbiteral, es la Misión.

En ese sentido, el asesor diocesano de la Pastoral de Misiones, padre Alejandro Jorquera Soto, dijo que “la invitación es a que este año 2023, el 2024 y, especialmente, el 2025, podamos recordar estos 100 años de la historia de nuestra diócesis y reencontrarnos entre nosotros, entre las diferentes comunidades parroquiales, las parroquias y pastorales de la diócesis y con la sociedad en general, a través de la misión y cumplir lo que Cristo desde un principio nos invitó, así como lo hizo con sus discípulos, y que es dar a conocer el Reino de Dios”.

Enfatizó que “la misión es y debe ser permanente en la Iglesia, cada acción pastoral que se realiza en la parroquia, en un colegio, es una misión, porque se está permitiendo el encuentro con Cristo”, dijo; y argumentó que “estamos acostumbrados a que las misión venga desde afuera, y, por supuesto ,son bienvenidas, sin embargo, en esta oportunidad la invitación es que seamos nosotros, nuestras propias comunidades parroquiales las que salgan a misionar en nuestra diócesis; especialmente, en aquellos lugares que están más distantes y donde a veces no hemos llegado y seamos nosotros los que los acompañemos, nuestros agentes pastorales, catequistas y laicos”.

EL ENCUENTRO CON CRISTO

El asesor diocesano, padre Alejandro recalcó que “la misión consiste en vivir un encuentro con Cristo, con la Palabra de Dios, y que, si bien, siempre es importante la formación, lo fundamental es el encuentro”. En ese sentido, dijo que “lo fundamental es compartir la experiencia de fe que cada uno tiene, cómo Cristo ha tocado mi corazón y darla a conocer, porque en ellas se encuentra la fortaleza, la esperanza en Él”, señaló; y aseveró que “la misión es dar a conocer esta experiencia con los desafíos que hoy como sociedad tenemos”. 

Explicó que “salir a misionar nos permite como diócesis volver a experimentar el cariño inicial, aquello que despertó en nosotros nuestra fe; mirar la historia y recordar por qué estamos en nuestras comunidades parroquiales, por qué decidimos ser sacerdotes, religiosas, religiosos, diáconos, agentes pastorales o catequistas, es importante volver al origen y recordar esa motivación inicial”.

LO PRÁCTICO

Para llevar adelante esta misión permanente en la diócesis, se formó un equipo de misiones encabezado por el padre Alejandro y que está trabajando en la confección de material, que “en realidad no es tan novedoso, porque la novedad siempre es Cristo, pero en ellos damos algunos esquemas para desarrollar la misión este año 2023”.

Éste será distribuido en las comunidades parroquiales, en las catequesis, en los colegios, porque “la idea –dijo el padre Alejandro- es llegar a la mayor cantidad de comunidades de la diócesis”. En ese sentido, el asesor diocesano señaló que “durante este año, el objetivo es que las comunidades puedan misionar en tres o cuatro ocasiones durante un día”.

En lo práctico, especificó que “cada parroquia también tendrá la libertad de confeccionar el material que considere adecuado, para complementar el entregado por el equipo diocesano de misiones, así como determinar los días de las misiones, lo importante es que “se sumen a las acciones diocesanas que se vayan anunciando y mantengan el eje central que es la misión y los 100 años de nuestra diócesis, para renovar nuestra fe y también plantearnos cómo seguimos en los próximos 100 años y dejar una huella para las futuras generaciones”.