Una comunidad participativa y misionera

Martes 28 de Febrero del 2023
• 55 años de vida pastoral de una comunidad misionera y de gran amor por las Sagradas Escrituras.

“Somos una congregación misionera y, por tanto, la misión ha sido siempre un aspecto importante dentro de la parroquia. Estamos siempre visitando sectores, compartiendo y motivando y tratamos de llevar la palabra de Dios a quienes normalmente no vienen a participar”, señala el padre Casimiro Martínez, párroco de la P. San José Obrero de Rancagua.
Esta parroquia, desde su creación 1968 (se desmembró de El Sagrario y quedó a cargo de la Congregación de los padres del Verbo Divino), ha tenido esta característica misionera y de amor por las Sagradas Escrituras.

Precisa el padre Casimiro, quien es oriundo de España (Navarra), pero lleva 52 años en Chile, que por mucho tiempo han destacado en la comunidad los grupos bíblicos. “Esto comenzó con el padre Manuel Bahl (fallecido el 10 de abril de 2022), que estuvo 29 años como párroco acá. En su época había cerca de 120 grupos bíblicos, cada uno de 8 o 10 personas”, cuenta. Hoy, señala que funcionan cerca 25 grupos bíblicos, que se reúnen periódicamente y comparten la Palabra de Dios, y a los cuales los sacerdotes visitan para apoyar y guiar.

Esto hace que la comunidad parroquial tenga una base sólida de conocimientos en el ámbito de las Sagradas Escrituras, lo que cual se sigue fomentando con talleres de formación.

Participación

 La comunidad parroquial de San José Obrero de Rancagua siempre ha buscado ser una comunidad de comunión y participación. Se trata de una parroquia muy diversa, que comienza en la población San Damián (cerca de la cordillera) y termina a la orilla del río. Sus comunidades son: San Lorenzo en la Villa Carén, Espíritu Santo de El Manzanal, Francisco Javier en la Oscar Bonilla, Sagrado Corazón en Dintrans, San Vicente de Paul en Las Rosas, Verbo Divino en la Rancagua Sur, Jesús de Nazareth en Isabel Riquelme y la sede parroquial de la Granja San José Obrero.

Son 8 capillas, cada una con características bien marcadas y cada una celebra sus propias fiestas patronales, pero al momento de trabajar por la parroquia, se unen todas. Con el crecimiento de la construcción, también han visto que se han hecho nuevos conjuntos habitacionales al sector parroquial (en Avenida Las Torres con la carretera) y llegado nuevos vecinos. Pero ha costado su incorporación y, a pesar de que se han hecho esfuerzos para ir a misionar a esos sectores, la gente no participa mucho. Aun así, el párroco dice que no descansarán en sus esfuerzos por misionar y dar a conocer la Palabra, por ello han hecho misas al aire libre y no dejan de promover la participación.
En cuanto al funcionamiento de la parroquia, el padre señala que tiene dos vicarios: el padre Stephen Nyantey y el recién incorporado a la comunidad, padre Graziano Beltrami; a los que se une el diácono Genaro Díaz. Además, cada comunidad cuenta con su consejo pastoral y económico, que se unen en el Consejo Ampliado de la parroquia (el que también están los coordinadores de áreas). Todo ello ayuda a mantener este espíritu de comunión y participación que se promueve. La Ayuda fraterna también se destaca por su servicio.

En cada comunidad hay un comité de ayuda fraterna, que se organiza para conocer a las familias de cada sector que están en situación más vulnerable para entregarles una bolsa de alimentos mensualmente. A eso se suma el comedor fraterno, pues los lunes y sábado se entrega (ahora para llevar) la comida preparada a cerca de 60 personas en situación de calle.

Desafíos

El padre Casimiro Martínez, señala que además de seguir con la misión en los nuevos conjuntos habitacionales, se ha planteado otros desafíos, como es la formación continua a través de talleres bíblicos; además de atraer a nuevos servidores del altar. Pero uno de los aspectos que más destaca es el interés en impulsar la pastoral juvenil.

Para ello, el padre Stephen Nyantey ha estado trabajando en la formación de un equipo que le permita implementar un plan de acción. De hecho, el domingo 12 de marzo van a invitar a los jóvenes de confirmación a una reunión después de misa, para ir conociéndolos y motivándolos a una mayor participación en la iglesia.

En cuando a las próximas actividades, cuenta que la comunidad de La Granja (sede parroquial) celebrará el 19 de marzo su fiesta patronal, en tanto que la fiesta patronal parroquial se celebrará el 1 de mayo, como es habitual. En esta oportunidad quieren que sea de más de un día para poder incluir acciones como visitas a los enfermos, talleres de formación, entre otras acciones. Además, con motivo de Cuaresma realizarán un retiro espiritual el 11 de marzo (Sede parroquial) y el 18 de marzo (Manzanal) para todos los agentes pastorales.