“Me siento feliz en mi vocación”

Martes 28 de Febrero del 2023
- El 11 de febrero tuvo lugar la Profesión Temporal de la Hna. Diana Sánchez Aguilar de las Hermanas Adoratrices del Santísimo Sacramento de Rancagua. En este Día de la Mujer, 8 de marzo, queremos destacar su testimonio.

En el día de la Virgen de Lourdes, el 11 de febrero, a las 10:00 de la mañana, en la capilla del Monasterio de la Divina Providencia de las Adoratrices del Santísimo Sacramento de Rancagua tuvo lugar la Profesión Temporal de la Hermana Diana Sánchez Aguilar.
La misa fue presidida por el Obispo de Rancagua, monseñor Guillermo Vera Soto, y en ella estuvieron presentes sacerdotes, familiares de la hermana Diana, fieles y religiosas de la congregación. Monseñor Vera, en la oportunidad, agradeció a Dios por esta “mujer valiente que es capaz de decirle al Señor: sí, quiero seguirte”.

La ceremonia fue especialmente emotiva para los presentes cuando la hermana Diana hizo su profesión temporal para luego ser revestida. Recibió así el escapulario (rojo) como signo de su empreño a vivir noche y día en la contemplación adorante del ministerio eucarístico y cambió su velo blanco por uno negro, como signo de su consagración a Cristo.

Además, fue coronada como esposa de Jesús. Esta nueva hermana adoratriz ha sido recibida con gran alegría por la comunidad diocesana, que sigue rezando por ella y por las vocaciones a la vida consagrada.

TESTIMONIO

“La primera vez que sentí que el Señor me pedía algo diferente fue en un momento de Adoración al Santísimo Sacramento, sentí una duda dentro de mi: "¿Por qué no ser toda del Señor?" Sin embargo, alejé de mi aquella inquietud, pues tenía "mis planes" y estaba contenta en mi camino, pero llevaba esa pregunta dentro de mí.

La providencia fue disponiendo las circunstancias y las personas indicadas y poco a poco con la gracia de Dios me fui adentrando en lo verdadero de aquél llamado. A las Madres Adoratrices las conocí por las redes sociales y, desde el primer momento, el nombre de la Orden me impactó, y después de un tiempo empecé a trabajar mi discernimiento con ellas y finalmente me atreví a contestar ese llamado. Esto implica "dejar mucho", entre lo más importante mi familia y mi país, era lo que pensaba, pero después de un tiempo, aquí el Señor me ayudó a comprender que junto a Él no perdía o dejaba, sino al contrario, lo ganaba y tenía todo. Y puedo decir con absoluta certeza que me siento feliz en mi vocación, me siento feliz de ser Adoratriz Perpetua del Santísimo Sacramento.

Y con esto invito a todas las jóvenes que en algún momento tuvieron o tienen esa "duda", esa "inquietud" y que por miedo tal vez no se atreven a contestar. Realmente vale la pena abrir el corazón al "plan de Dios", a la "Voluntad de Dios" sobre nuestra propia vida. Él nos quiere felices y libres, y nos muestra el camino que hay que seguir. Frente a Jesús Sacramentado siempre hay una Adoratriz rezando por ti”.
Hna. Diana Sánchez Aguilar.

 

Columna

"LA MUJER MÁS PODEROSA DEL MUNDO"

“La mujer más poderosa del mundo”, así presentó el Secretario General de las Naciones Unidas a la actual Santa Teresa de Calcuta en su visita a la sede de dicha organización en 1985. Lo recordamos al celebrarse el Día Internacional de la Mujer, como un homenaje y reconocimiento a todas las mujeres que día a día expresan en sus diversas actividades el poder del amor de Dios, entregado con generosidad y valentía en el mundo entero. Junto con cuatro sacerdotes diocesanos, en la década del 90, participamos en un Retiro Mundial para Sacerdotes organizado por la Renovación Carismática en Roma.

En el Aula Paulo VI, Madre Teresa de pie, pequeña, con el habitual sari, el rosario en sus manos, en inglés, con traducción simultánea entregó su tema, enseñanza sencilla de hondo contenido, su voz clara y potente se contradecía con su figura. Nada nos hacía suponer de su "noche oscura" conocida después de su muerte por las cartas escritas.
Enseguida contó de la experiencia en Leningrado, actual San Petersburgo, al abrir una casa para enfermos psiquiátricos, con tenacidad y oración constante las Misioneras de la Caridad conquistaron el respeto y aprecio de las autoridades locales, algo totalmente inesperado en ese tiempo. Cuando en 1979 se le concedió el Premio Nobel de la Paz, fue destacada por su trabajo emprendido en la lucha por superar la pobreza y la angustia, que constituyen una amenaza para la paz.

En otras instancias se remarcó además su actitud como: "Ejemplo viviente de la generosidad y humildad en el servicio con los demás, su objetivo, ayudar al más pobre de los pobres". Antes de su muerte había dicho: "Si alguna vez llego a ser santa -seguramente seré una santa de la "oscuridad". Estaré continuamente ausente del Cielo - para encender la luz de aquellos que en la tierra están en la oscuridad". Es la forma en que esta gran mujer sigue mostrando el poder de Dios en una humanidad cada vez más necesitada de esa LUZ. Pbro. José Miguel Ortiz B.